Atención Visual y Movimientos Oculares

Este laboratorio estudia la percepción visual con un enfoque en la interacción entre los movimientos oculares y la atención. Está bien establecido que prestar atención a un estímulo puede alterar profundamente la percepción. Por ejemplo, asistir a un orador en una fiesta llena de gente puede filtrar casi por completo el fondo tanto en términos de ruido auditivo como de distracciones visuales. Aunque los estudios de laboratorio han investigado tradicionalmente los efectos de los cambios de atención en ausencia de movimientos oculares, en condiciones naturales, la atención visual suele ir acompañada de movimientos de orientación para dirigir la cabeza y los ojos hacia los objetos de interés relevantes. Trabajos recientes han sugerido que estos movimientos de orientación afectan la percepción de manera similar a la atención encubierta. Los estudios propuestos investigarán cómo los movimientos oculares contribuyen a la percepción y la atención.

La investigación cubierta por este protocolo combina la psicofísica tradicional de "presionar un botón" con el seguimiento ocular no invasivo para investigar la interacción entre los movimientos oculares y la percepción. Los sujetos realizarán tareas perceptivas simples, como juzgar la orientación o la dirección de un estímulo visual, mientras se monitorea la posición de sus ojos con un rastreador ocular de video. Este enfoque (que combina psicofísica y seguimiento ocular) es flexible, de bajo riesgo y rápido en comparación con los estudios neurofisiológicos. Sin embargo, al centrarse en tareas de percepción de bajo nivel, los resultados serán interpretables en el contexto de estudios más amplios de respuestas neurofisiológicas en el sistema visual.

Los investigadores esperan que esta investigación básica finalmente tenga un significado clínico y aplicado. Por ejemplo, comprender cómo la atención y los movimientos oculares influyen en la percepción en poblaciones neurotípicas puede proporcionar formas no invasivas y naturalistas para identificar y diagnosticar trastornos psiquiátricos. Además, comprender cómo interactúan los movimientos oculares con la codificación sensorial tiene el potencial de mejorar los algoritmos de aprendizaje automático para la visión y la navegación (estos no son parte del estudio actual, sino un posible impacto futuro).